El slime casero suele divertir muchísimo a los niños. Su consistencia pegajosa y maleable, lo convierte en un juguete que entretiene a los peques durante horas. Por eso, hoy compartimos contigo dos maneras diferentes para hacer slime en casa.
Slime 1:
Materiales:
- 4 cucharaditas de Bórax (lo consigues en droguerías, se usa para lavar.)
- Agua caliente.
- 1 taza de pegante (colbón o ega)
- Colorantes de alimentos
Mezcla 3/4 de agua caliente con el pegante y algunas gotas de colorante elegido.
En otro bol mezcla 4 cucharaditas de bórax con 1 1/3 taza de agua caliente.
Hecha la primera mezcla dentro de la segunda y dejala reposar sin agitar o revolver y ¡Listo!
Ten en cuenta que el bórax puede ser tóxico si se ingiere, con lo cual este juguete no es apto para niños menores de 5 años y siempre advertirles que de ninguna manera lo ingieran.
Slime 2 (sin borax)
La textura no queda exactamente igual.
Materiales:
- 1/2 tazas de harina de trigo
- Taza de Maicena
- 1/2 taza de agua
- Colorantes.
Mezcla la Maizena con 3/4 taza de agua y el colorante elegido en una olla. Calientala a fuego lento hasta que empiece a espesar.
Incorpora la harina de a poco y finalmente, agrega el agua restante. Retira del fuego y deja enfriar completamente antes de empezar a jugar.
Para conservar el slime (con bórax o sin él) te recomendamos guardarlo dentro de una ziploc o frasco, para evitar que se seque.
Si deseas saber más formas de hacer el Slime te compartimos el siguiente video.