Hola familia, soy la Dra. Laura del Mar Vásquez, Alergóloga y Pediatra.
Hoy hablaremos sobre:
Cambios de la piel por envejecimiento
La piel cambia con nosotros, se adapta al medio ambiente en el que estamos y nos protege de todas las agresiones que puedan llegar del exterior. Así como nuestro cuerpo envejece, ella también lo hace.
En los extremos de la vida (bebe y adultos mayores) la piel es más frágil, delicada y sensible requiriendo cuidados especiales para evitar alteraciones o lesiones cutáneas.
La piel del adulto mayor pierde grosor por cambios a nivel celular y pérdida de grasa subcutánea lo que la vuelve más delgada y fina lo que permite la observación de capilares sanguíneos y volviéndola más susceptible a golpes con formación de morados con mayor facilidad.
Síntomas:
- Hay disminución en la producción de lípidos y retención de líquidos por lo que la piel se reseca con mayor facilidad lo que genera entre otras cosas piquiña en la piel.
- Las células de la piel se recambian con mayor lentitud lo que hace que la cicatrización se vuelva más lenta o no se logre de una manera adecuada.
- Hay disminución de melanocitos, células que le dan el pigmento a la piel y nos protege de los rayos ultravioletas generando una mayor susceptibilidad a la exposición solar y mayor riesgo de cáncer.
- Hay atrofia de las glándulas sudoríparas lo que predispone al adulto mayor a tener hipotermia o al golpe por calor.
- Hay alteración y pérdida de colágeno lo que genera la aparición de las arrugas.
Es importante tener en cuenta todos estos cambios, para ser conscientes que durante esta etapa de la vida, es indispensable tener un mayor cuidado de nuestra piel y utilizar productos especiales dermatológicos para esta etapa.